Conócete como los grandes líderes se conocen

8 Nov, 2021Liderazgo, Por Blanca Salinas

¿Qué te hace un buen líder?

Para dar lo mejor de ti, debes conocer tus capacidades y fortalezas personales, pero para ser mejor líder, además, es tu responsabilidad conocer y desarrollar ciertas cualidades de liderazgo. Esas cualidades pueden ser encausadas hacia tu propio bien y el de tu entorno, apalancándote en ellas para dar mejores resultados.

¿Qué cualidades te definen como líder?

¿Qué papel juegan las fortalezas en tu rendimiento y liderazgo? Todo parte del conocimiento de uno mismo: si te conoces bien y sabes cuáles son tus fortalezas, valores y habilidades, entonces serás capaz de avanzar. ¿Avanzar hacia dónde? Hacia mis metas trazadas, sabiendo también cuáles son tus objetivos y prioridades.

Y te pregunto: ¿qué nos define? ¿es nuestra genética? ¿o son el entorno y las experiencias lo que determinan quiénes somos? ¿Nacemos o nos hacemos buenos líderes en el camino, con la suma de las experiencias y conocimientos reunidos en el camino? Para responder estas preguntas, seguramente habrá tantos puntos de vista para este planteamiento como personas en el mundo; aquí te comparto mi punto de vista a tan solo unos meses de que termine este 2021.

Uno de los autores que desde la universidad he admirado y que, sin importar el año en el que lo escribió, me sigue pareciendo vigente, es Peter Drucker. Inspirada en la lectura, gracias a un curso de Liderazgo en la Innovación en el MIT que estoy estudiando ahora, releí un extracto sobre su postura acerca de La Gestión de uno Mismo (Managing Oneself) que escribió en 1999, publicado por Harvard Business Review, en donde resalta precisamente la importancia de autogestionarnos y ser conscientes de nuestros puntos fuertes, nuestros valores, la forma en que aprendemos mejor, entre otros aspectos.

La gestión de uno mismo

Peter Drucker dice que la única forma de conocer esto es analizando nuestro propio feedback en situaciones importantes, por ejemplo, el comparar la expectativa con el resultado real y reconociendo qué acciones nos ayudan a obtener el máximo provecho de nuestros puntos fuertes; luego, trabajar para mejorarlos aún más para evitar lagunas ocultas o puntos ciegos en estos puntos fuertes. Estos últimos, los podremos rellenar solo con habilidades, conocimientos, práctica y constancia, las cuales potencializaremos en nosotros, las perfeccionaremos.

Además, el autor señala que debemos tener consciencia de en qué contextos o situaciones no somos los más competentes , ya que nadie puede basar su desempeño en sus debilidades. En este autoconocimiento, debemos saber de qué forma aprendemos mejor , si somos visuales, auditivos o kinestésicos, lo que cobra relevancia también a la hora de comunicarnos.

En cuanto a los valores , tener claro lo que es más importante y lo que no negociable, te ayudará a encontrar en dónde encajar mejor. Así, el autoconocimiento será una herramienta importante en situaciones muy diversas. Por ejemplo, en la búsqueda de un empleo, es de vital importancia que los valores de la organización vayan en congruencia con los tuyos , de esa forma podrás desempeñarte mejor; cuando tus valores son incompatibles, se puede generar frustración o un desempeño pobre y tarde o temprano esto generará conflictos, resistencia y puede acabar con la relación laboral.

Al hablar de trabajo en equipo, para obtener los mejores resultados hay que hacer sinergia. No se trata de ser todólogos, sino de poner a disposición del equipo las fortalezas de cada uno para sumar y disminuir puntos ciegos.

El autoconocimiento es la llave

Como lo he dicho antes, hoy debes tener la habilidad de conocerte bien para optimizar tu aportación y hacer la diferencia en la organización y con tus clientes, por supuesto.

Pienso que, como lideres, debemos ser facilitadores y generadores de espacios de feedback para que todos puedan dar lo mejor de ellos mismos. Tu tarea y obligación será conocer bien a cada integrante del equipo, tener la habilidad de comunicarme en el canal correcto, conocer sus fortalezas, observar, apoyar, preguntar para entenderlos mejor.

En Blanca Salinas, Desarrollo y Mejora Continua, podemos ayudarte con diferentes herramientas para mejorar el autoconocimiento. Una de ellas es el coaching de equipos, para que cada persona se haga consciente de sus propias fortalezas y pueda potencializarlas para alcanzar los objetivos de la organización, esto les ayudará a ir al siguiente nivel en resultados.

El trabajo diario de ser mejor cada día

En definitiva, no hay atajos o varita mágica. Para ser una mejor persona y líder que inspire debes ser responsable, mantenerte en forma, actualizarte, estudiando las tendencias (Lifelong Learning) y potencializando tus fortalezas, así como reconociendo las de aquellos que conforman tu equipo. También deberás tener tus objetivos y metas claras, que vayan de la mano de tus valores; inteligencia emocional, inteligencia social, empatía y congruencia entre lo que se dice y lo que se hace; sin olvidar, hacer auto feedback para evaluar dónde estás y hacia dónde quieres ir. Siempre es válido recalcular la ruta si cuando te has desviado de la meta y planear nuevamente.

Te invito a reflexionar en las siguientes preguntas: ¿Qué tan bien reconoces tus puntos fuertes? Y ¿qué fortalezas identificas en ti que te hacen dar el máximo en lo que haces? ¿Qué podrías mejorar para ser un mejor líder?

Por último, te dejo con estas dos frases de Peter Drucker, 1999:

“El éxito en la economía del conocimiento, llega a quienes se conocen a sí mismos: sus puntos fuertes, sus valores y su mejor desempeño.”

“Coloca a tu gente donde sus fortalezas pueden producir resultados.”

Recuerda concentrarte en tus fortalezas, enfócate en robustecerlas y mejóralas; sitúate donde éstas te ayuden a producir los mejores resultados y agrega valor. No dejes de aprender e inspira a otros.

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